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Tratamientos específicos para cada tipo de cabello.
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Un cuero cabelludo con picores es un cuero cabelludo desequilibrado que se ha vuelto demasiado seco como consecuencia de diversas agresiones externas o internas.
Entre los factores externos se encuentran los cambios estacionales, la contaminación, el uso de productos inadecuados para el cuidado de la piel con demasiada frecuencia y el uso de un secador demasiado caliente, que puede quemar el cuero cabelludo (y la fibra capilar). Entre las causas internas, el estrés, el cansancio, una mala alimentación o un cambio en el ciclo hormonal pueden afectar a la naturaleza de la piel y el cuero cabelludo y provocar hipersensibilidad.
Descubre 5 buenas maneras de limitar el picor de tu cuero cabelludo.
El primer paso para aliviar el picor del cuero cabelludo es eliminar de tu cuarto de baño los champús demasiado agresivos. Todos los champús que contienen sulfatos, siliconas y parabenos corren el riesgo de dañar y resecar aún más el cuero cabelludo.
Intenta espaciar los champús lo máximo posible para dejar respirar el cuero cabelludo. Cuando te apliques el champú, asegúrate de no frotar demasiado el cuero cabelludo y realiza un ligero masaje con las yemas de los dedos.
Después de lavarte el pelo, ten cuidado al secarlo. Frotar fuerte con la toalla podría irritar tu cuero cabelludo ya dañado, así que sécate el pelo suavemente sin frotar. No utilices el secador para secar el cuero cabelludo, al menos hasta que lo hayas rehidratado. A la hora de peinarte, evita en la medida de lo posible recogerte el pelo para evitar tirones demasiado fuertes en el cuero cabelludo.
Del mismo modo, llevar regularmente un sombrero o una gorra puede ayudar a sofocar el cuero cabelludo y provocar picores. Por último, aunque el picor del cuero cabelludo puede ser muy desagradable, es importante no rascarse y evitar juguetear constantemente con el pelo, ya que esto sólo empeorará la situación. La clave es dejar que el cuero cabelludo respire y descanse.
Para tratar el picor del cuero cabelludo, existen gamas específicas para el cuidado de la piel. Puedes encontrar lociones y sueros para aplicar sobre el cuero cabelludo todos los días, masajeando con las yemas de los dedos. Así hidratarás el cuero cabelludo y lo calmarás rápidamente.
Además, un cuero cabelludo poco sano puede provocar la caída del cabello o un crecimiento deficiente, con cabellos finos y quebradizos. Así que lo mejor es reaccionar rápidamente y no dejar que la situación se agrave.
En caso de picor intenso o numerosas costras en el cuero cabelludo, lo mejor es consultar a un dermatólogo, que podrá hacer un diagnóstico y orientarle hacia el tratamiento adecuado. Podría tratarse de psoriasis, inflamación grave o infección, y para evitar que la situación empeore, lo mejor es buscar ayuda profesional.
Frena tus ganas de rascarte la cabeza. Cuanto más te rasques, más aumentará la inflamación.
Inspirándonos en el cuidado de la piel, ahora nos centramos en los exfoliantes para el cuero cabelludo. Aplicados directamente sobre el cuero cabelludo seco, se masajean durante unos minutos para eliminar las células muertas acumuladas. Desintoxicado, el cuero cabelludo recupera su equilibrio. Se trata de una alternativa interesante al champú anticaspa clásico, cuya eficacia contra los hongos es innegable, pero cuyos tensioactivos son un poco demasiado fuertes.
